Por cuestiones laborales viajamos hace unos días al paraíso, y de eso se trata el post de hoy, de las Islas Bahamas.

A sólo una hora de viaje desde el aeropuerto de Miami, encontramos este asombroso archipiélago de 700 islas diseminadas por más de 3,800 km2 de océano tropical y cristalino, en la parte norte del Caribe.

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Si bien hay quienes deciden embarcarse en un crucero de unas pocas noches para conocer estas islas, la organización del evento nos permitió intercalar trabajo con descanso desconectándonos verdaderamente y conoceciendo toda la belleza de este paraíso.

Y de la parte de ocio hablaremos.

Para disfrutar la estadía al máximo, lo recomendable es elegir un hotel de categoría superior que nos brinde todos los servicios de comidas. Y es que si bien una noche en hotel 4* o 5* all inclusive puede parecer algo costosa, los precios de un almuerzo o una cena en algún local de Nassau son considerablemente altos y se vuelven una opción económicamente poco conveniente.

Nos alojamos en el Melia Nassau Beach Resort & Casino, y la experiencia fue muy gratificante. Además de las comodidades propias de este tipo de complejos, encontramos hermosas playas de arenas blancas, una oferta gastronómica muy variada (con opciones de comida mexicana, italiana, asiática, mediterránea y americana) y numerosas actividades nocturnas que hicieron de nuestra estadía un verdadero tiempo de relax.

Las islas son perfectas para realizar cualquier tipo de actividad acuática imaginable, porque el océano es cristalino y de color celeste y resulta ideal para practicar buceo en el tercer mayor arrecife de coral del mundo, para nadar con delfines y enormes cardúmenes de peces y para practicar vela y kayak.

Una curiosidad de este archipiélago es que muchas de las islas que lo componen son privadas y llevan el nombre de sus famosos propietarios. La cercanía respecto de USA, las convierte en una opción de lujo ideal para aquellas celebridades que buscan tranquilidad y completa privacidad a la hora de tomarse un descanso laboral o que buscan inspiración para sus nuevos proyectos.

Por eso, no es extraño escuchar que artistas como David Copperfield, Eddie Murphy, Johny Deep, Nicholas Cage, Beyoncé y Lenny Kravitz escapan de la fama por unos días y se refugian en las Bahamas para disfrutar del paraíso del anonimato. Una corta excursión de 2hs en una embarcación con piso de cristal nos lleva a recorrer algunas de estas exclusivas islas.

Para los amantes de golf, Bahamas es un destino muy recomendable porque ofrece 11 clubes de inmejorable nivel y dificultad. Aunque no somos expertos, nos hicimos tiempo para conocer uno de los desafiantes campos, el Ocean Club Golf Course, que combina categoría mundial con un paisaje de suaves olas de color azul claro.

Si bien Nassau no cuenta con grandes malls donde hacer compras, en nuestra excursión por Bay Street –el centro comercial de Nassau– nos permitimos visitar algunos de los locales más exclusivos del mundo. Lo que por fuera sólo son casas sencillas, por dentro albergan a las más lujosas joyerías y marcas de relojes, como Cartier, Bvlgari y Salvatore Ferragamo. El detalle más importante a recordar es que las islas son un paraíso fiscal y por eso muchos de artículos (ropa, accesorios, perfumes, licores y vinos, cigarros y puros, joyas y relojes) son libres de impuestos!!

Otra opción para ir de compras es el famoso Mercado de Paja (Straw Market), en donde vendedores locales ofrecen mercancía elaborada con hojas de palma, madera y cerámica que sirven como un lindo recuerdo de nuestra visita a la isla.

La hospitalidad de los bahameños es destacable y en cada lugar que visitamos fuimos recibimos con sincera amabilidad. Aun cuando el particular acento inglés de los locales puede resultarnos algo inentendible en nuestras primeras horas en las islas, siempre se mostraron predispuestos a ayudarnos y quedamos encantados con su sencillez y alegría.

Porque viajar enriquece el alma, y nos permite saber que el paraíso en la Tierra existe!