Veníamos de un viaje muy tranquilo desde Buenos Aires y teníamos un poco más de dos horas para subirnos al Boeing 787-9 que nos llevaría a Nueva York.

Aprovechando la Priority Pass fuimos a conocer el Salón VIP de Avianca ya que nos habían dicho que al anochecer no era muy concurrido.

El circuito de pasajeros en tránsito es muy ágil en el Aeropuerto de Santiago. Ubicamos rápidamente la puerta 12B y bajamos hasta el salón.

Cuando ingresamos no podíamos creer lo que estábamos viendo… un salón de dimensiones reducidas, impecable por donde se lo mire… pero SIN GENTE!!!!

Estábamos absolutamente solos.

El salón dispone de comida ligera con muy ricos sandwich de salmón y palta y los típicos de jamón y queso, medialunas, panificados varios, frutos secos y hasta una tostadora que le dá un toque muy positivo a la experiencia.

También se puede tomar una sopa, que en ese momento era de vegetales y estaba muy sabrosa.

El mini sector de cosas dulces cumplía sin destacar.

La parte de bebidas era correcta, con gaseosas, aguas y cerveza. También algunos vinos y licores, obviamente chilenos y muy agradables. La máquina de café con tazas «de verdad» es otro punto alto en la evaluación.

La conexión wifi funcionaba a la perfección, de hecho desde allí escribimos el post del Salón VIP de StarAlliance en EZE.

Los baños estaban impecables y en perfectas condiciones.

Tiene también una sala (auspiciada por Samsung) donde hay tabletas y laptops de libre disponibilidad y a su lado un lugar de relax con menos luz y sillones tipo poltronas.

Sin dudas un lugar ideal para esperar una conexión, sereno y con buenas opciones para un picoteo previo a un vuelo.

Pueden acceder sin cargo los miembros Gold (o superior) de StarAlliance o los poseedores de la tarjeta Priority Pass.

A viajar que enriquece el alma.